jueves, noviembre 22, 2007

Crónicas de Gaia # 5

En su interior podía apreciarse un bulto borroso suspendido en medio de la sustancia verdosa; no pude ver detalles que me permitieran discernir si se trataba de un ser humano o de un animal o de algo más. Lentamente rodee el contenedor, y en un extremo divisé un pequeño artefacto adherido al cristal que brillaba de forma hipnótica e intermitente, y sobre este, como reflejado desde adentro hacia la superficie escarchada una imagen de colores cambiantes. Pasé mi mano por para limpiar la delgada capa de cristales, y pude ver con claridad lo que se proyectaba de alguna forma y sin relieve alguno en el vidrio; era una especie de dibujo del cuerpo de un humanoide recorrido de pies a cabeza por líneas y puntos de diferentes tonos en intensidades que parpadeaban y se movían sin cesar. Tuve la sensación que de alguna forma, lo que estaba adentro estaba vivo aún y esta extraña ciencia permitía saber el estado en que se encontraba. Junto a mi Krhol se posó de cuclillas y miraba con infantil curiosidad el objeto metálico bajo las luces, apenas me percaté cuando su mano lo tocó y un segundo después con un extraño sonido profundo y acuoso el tubo frente a nosotros comenzó a drenar su contenido quien sabe hacia donde, revelando poco a poco el contenido oculto, mientras el dibujo de su cuerpo parpadeaba con nuevos colores, anunciando que estaba despertando....

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy buena esta obra de Crónicas de Gaia. Estoy intrigado por saber cómo continua. Gracias.